Frutas y verduras para la colonia

Frutas y verduras para la colonia
Principios del siglo XX. «La laguna junto a la bahía», Gibraltar. Dibujo de Gil Joseph Podesta tomado de su libro ‘Sketches of Old Gibraltar’ (2001)

Frutas y verduras para la colonia

Cuando se fundó el pueblo de La Línea, en el término municipal había 150 huertos que surtían a la población militar y civil de Gibraltar. Hasta finales del siglo XX en la Bahía de Algeciras y pueblos cercanos se cultivaban verduras y frutas de tradición británica. Algunas como el nabo, rábano, remolacha, maíz, fresa o fresón tuvieron poco protagonismo en la dieta gaditana hasta avanzado el siglo XX.

En los pequeños huertos se regaba con un sistema de canalillos de ladrillo que partían de una acequia, de un pozo o de una noria. En la mayoría el agua se trasladaba a mano en latas de gasolina o de té. Para proteger las huertas de los fuertes vientos locales se hacían empalizadas de caña (familia Poaceae) y vallados naturales de pita (Agave americana) y chumbera (Opuntia ficus-indica). Francisco Gil cogió un puesto de verduras en el mercado de La Línea a finales de los años cuarenta del pasado siglo: «Muchos me compraban para venderlo en Gibraltar y traían de allí otras cosas. En ese mercado se vendía más para Gibraltar que lo que se consumía en La Línea».

Los carros de la verdura cruzaban la frontera a diario y recorrían las calles de la ciudad. El dibujo de Gil Joseph reproduce una escena en una laguna que ya no existe, y que recuerdan las personas mayores del lugar. Gil anotó junto al dibujo: «Al atardecer, tras descender con dificultad las estrechas y empinadas calles de Gibraltar, los vendedores ambulantes desenganchan de los carros sus caballos o mulas y los limpian en la laguna junto a la garita antes de regresar a España»