El reconocimiento de las necesidades biológicas

El reconocimiento de las necesidades biológicas
2020. El pequeño Najib recibe las gotas de la vacuna contra la polio en Uganda. La vacunación se ha convertido en una de las herramientas imprescindibles para salvar la vida de millones de niños y niñas en todo el mundo © UNI325806/Zahara Abdul

El reconocimiento de las necesidades biológicas

Históricamente, el reconocimiento de las necesidades biológicas es anterior al de las psicológicas. La alimentación es la primera necesidad biológica reconocida siendo la lactancia natural el método universalmente recomendado. Los hijos e hijas de la nobleza eran amamantados por amas de cría, cuidadosamente seleccionadas, y las niñas eran destetadas antes que los niños. A partir del siglo XVII la madre es la persona idónea para amamantar a sus hijos. Hasta el siglo XVII el fajamiento era una práctica habitual. Mantenía a los lactantes abrigados, evitaba lesiones y permitía mantener la postura erecta. Esta práctica acabó mostrándose nociva puesto que producía secuelas físicas y psíquicas. La evolución de la indumentaria infantil, a partir del siglo XVII, se ve afectada por el sexo y la clase social. Las niñas continúan vistiendo como mujeres adultas y sólo los niños de las clases más acomodadas llevaban vestidos infantiles. La higiene se encuentra, en general, bastante desatendida hasta bien entrado el siglo XIX, aunque hay diferencias debidas a la clase social. En 1498, Paolo Bagellardo publica el primer tratado sobre enfermedades infantiles. Pero hay que esperar hasta el siglo XIX para que mejore significativamente la salud materno-infantil. Hasta el siglo XIII son muy escasos los documentos sobre pautas de sueño y descanso. A partir de ese momento se recomienda que los niños y niñas no duerman con sus progenitores para evitar las muertes por asfixia y aplastamiento. El ejercicio físico no se consideró necesario para el desarrollo infantil hasta bien entrado el siglo XIX, lo que hasta entonces suponía una clara restricción de la libertad de movimientos para evitar accidentes.