El ritmo de crecimiento del cerebro en humanos y chimpancés

El ritmo de crecimiento del cerebro en humanos y chimpancés
2015. Trayectorias de crecimiento en volumen cerebral (en centímetros cúbicos, en azul) y velocidad (en centímetros cúbicos por semana, en rojo) en 'Homo sapiens' y 'Pan troglodytes' desde el período gestacional a la edad de ocho años. Las franjas verticales amarillas señalan la edad media y rango de variación en la edad de erupción gingival del primer molar permanente. Imagen: Mario Modesto Mata en Bermúdez de Castro et al. (2015), Fig. 1 © Mario Modesto Mata

El ritmo de crecimiento del cerebro en humanos y chimpancés

Si el cerebro fuera ciertamente el marcapasos del ciclo vital cabría esperar que la duración de ciertas etapas del desarrollo de nuestros parientes homínidos actuales y el de los humanos actuales fuera muy diferente. Sin embargo, las evidencias sugieren que el cerebro alcanza casi su tamaño definitivo hacia los seis años tanto en los chimpancés como en los miembros de nuestra especie, como se puede apreciar en la figura superior. Sin embargo, nuestro cerebro crece a una velocidad mucho mayor, tanto durante la gestación como después del nacimiento. La duración del ciclo vital no está en ningún modo ligada al progresivo crecimiento del tamaño del cerebro, sino que responde a otras necesidades adaptativas.

También podemos medir la relación entre el tamaño del cerebro de los recién nacidos y el cerebro de los adultos. Si el cerebro tiene una estrecha relación con el ciclo vital cabría esperar datos muy diferentes entre chimpancés y humanos. En efecto, el cerebro del recién nacido de Homo sapiens representa, en promedio, el 28% del tamaño del cerebro del adulto. Mientras, en Pan troglodytes ese promedio es del 37%. Sin embargo, el rango de este porcentaje en las dos especies se solapa, aunque sea mínimamente: Homo sapiens (23-31%), Pan troglodytes (30-40%). De nuevo, esta variable nos sugiere que la regulación del tamaño del cerebro puede seguir un camino paralelo al del ciclo vital, pero sin que exista una clara dependencia entre ellos. [José María Bermúdez de Castro]