El ‘buleváter’
En 2022, tanto el Huerto como «Las Noches del huerto» crecían y gozaban de muy buena salud con nuestra propuesta de ocio saludable y de cultura diversa, de esa que nos hermana. Y, el antaño descampado, era ese lugar de encuentro con el que habíamos soñado.
Pero llegaron los PIBA («Planes Integrales de Barrio»), unos proyectos financiados con Fondos de Reequilibrio Territorial cuya misión es exactamente esa, aunque nuestras demandas se nos van denegando siempre: centro cultural, biblioteca, piso de emergencia habitacional, aulas de estudio…
Gracias a nuestro esfuerzo y trabajo conjunto, hemos comprendido que no necesitamos nada que pueda aportarnos la Junta Municipal, salvo un váter. Una de esas cabinas mantenidas por el Ayuntamiento y tan necesaria para uso de los paseantes, hortelanos o espectadores de «Las Noches del huerto» y de otros eventos que se celebran allí.
Accedimos a su deseo de intervención a cambio del váter. Sin conocer que la «mejora del espacio» consistía en un perímetro de cemento y baldosas en el suelo que intentamos renaturalizar, y que pone en peligro nuestros árboles (aceras enormes que dividen el espacio y no mejoran la accesibilidad). Para terminar con la pesadilla nos dicen que no va a ser posible lo del baño. Indignación.
Hicimos una jornada de protesta en abril de 2023 y decoramos «su intervención» con flores plantadas en váteres. Convertimos una acera en un colorido bulevar, nuestro buleváter. No gustó en la Junta Municipal ni nuestro humor ni nuestro arte. Y el buleváter no duró ni 24 horas.