Aguadora medieval
Los cantaros utilizados para ir a buscar agua eran generalmente de barro, con una cabida media de 8 a 10 litros, tenían una o dos agarraderas para facilitar su transporte y se apoyaban sobre la cabeza en un rodete para mantenerlo en equilibrio, como se observa en la aguadora mudéjar del siglo XIII. Para aprovechar el viaje, se podía llevar además, un cántaro pechero, de una sola asidera, apoyado sobre cadera y pecho.
Foto: Angel Martínez Levas