Abuela y nieta. Isaba, Navarra (España)
La transmisión intergeneracional de la pobreza ha sido una realidad en la historia humana y a pesar de los grandes avances sociales realizados, se mantiene con matices en la Europa del siglo XXI, donde el nivel educativo alcanzado por los padres está íntimamente relacionado con el riesgo de pobreza de sus descendientes.
En 2010, el riesgo de pobreza entre los menores europeos cuyos padres tenían nivel de estudios primarios duplicaba el de los que tenían padres con nivel de estudios medio y multiplicaba por seis el de los que tenían padres con titulaciones superiores (respectivamente 60%, 30% y 10%). La crisis económica de 2007 ha determinado que entre 2010 y 2014 el riesgo de pobreza o exclusión social de los niños y niñas europeos aumentara en todos los niveles educativos paternos
Foto, José Roldán Bidaburu