Continuidad cultural: el ‘tintinábulo’, la campana procesional usada desde época romana

Continuidad cultural: el ‘tintinábulo’, la campana procesional usada desde época romana
(1) Basílica de la Preciosa Sangre, Heilig-Bloedbasiliequk, Brujas (Bélgica). (2) Basílica de Cáeza, Cundinamarca (Colombia). Fuente: ‘Carolus’, noviembre, 2016

Continuidad cultural: el ‘tintinábulo’, la campana procesional usada desde época romana

En la Antigüedad las campanas se usaban en la vida cotidiana para llamar a las puertas colocándolas en los dinteles. Y estaban asociadas a ceremonias y procesiones rituales como sucedía en el culto estatal al emperador en la Mérida romana con el traslado procesional de las imágenes imperiales. Lo que se ha mantenido en procesiones católicas con el denominado tintinábulo, un varal adornado del que pende una campanita anunciadora del Papa (o del Santísimo en el Corpus) y que, junto a la sombrilla, son elementos asociados al papado y propios de las iglesias basilicales y catedralicias.

En una sociedad urbana temprana que atraía numerosas personas que no se conocían, la autoridad debía protegerse de agresiones anunciando su presencia y los viandantes mostrar su ánimo no beligerante postrándose o escapando. Una campanilla repicando por las calles oscuras protegía al cura que llevaba el viático, señalando la presencia divina en la consagración. El juez en España usa la campanilla para hacer cumplir su voluntad en la sala de vistas y hasta hace poco también lo hacía el maestro ante una clase nutrida.